miércoles, 17 de febrero de 2016

OBJETIVOS PARA ERRADICAR EL FEMINICIDIO



OBJETIVO GENERAL
Determinar las causas y consecuencias del feminicidio en RD.

OBJETIVOS ESPECIFICOS.

  • ESTABLECER LAS ORGANIZACIONES QUE TRABAJAN EN R D para erradicar el feminicidio.
  • Determinar cual es el sexo que sufre mas violencia.
  • Buscar soluciones a la cantidad de feminicidios ocurridos en RD.



Justificación

La irrupción en el panorama nacional dominicano de un potencial asesino en serie, que habría ultimado en los últimos diez días a cuatro mujeres, presumiblemente trabajadoras sexuales, agrega perversidad y dramatismo al problema de la violencia contra las mujeres en este país donde, pese a esfuerzos innegables, el crimen contra ellas no cesa.
En una población de algo más de ocho y medio millones de habitantes, cada 36 horas una mujer ha sido baleada, acuchillada o ha perecido golpeada solamente en el mes de enero.
Otras han aparecido muertas, con su cabeza machacada, cual parece ser el modus operandi del asesino de Villa Mella y Boca Chica, dos poblaciones muy cercanas a la capital dominicana, a menos de una hora del centro, hacia el este, la primera urbana y la otra de playa turística.
Aunque detalles morbosos no agregan mayores elementos, hasta ahora las cuatro víctimas halladas han sido lanzadas en parajes deshabitados, semidesnudas y con evidencias de violación, según el dictamen forense, lo que contribuye al clima de intranquilidad donde, no obstante, hay múltiples matices.
La joven magistrada Roxanna Reyes, procuradora general adjunta para Asuntos de la Mujer, asegura a SEMlac que la disminución del 35 por ciento de los femicidios íntimos, y que un número importante de las denuncias de las mujeres en el presente, (sean por violencia psicológica y verbal), habla de los avances que se van logrando. "Las mujeres no esperan a que les den, cuando observan que eso viene, van y denuncian", precisa.
La jurista, quien lidera el tema desde hace casi cuatro años en el Ministerio Público, mencionó la expresión "femicidios íntimos", término muy debatido porque enmascara la real dimensión del problema, si se considera que mujer muerta es mujer asesinada, sea en una riña callejera o en el interior

La doctora Reyes Acosta resaltó, sin embargo, "la trascendencia jurídica de que la noción femicidio esté aceptada en la terminología pública y en los medios de difusión", pese a no estar contenida en Códigos y leyes de país.

"Sabemos bien cuánto le cuesta a una mujer ir a denunciar, pero cada una que lo hace está consiguiendo alejar muchísimo la posibilidad de que ese hombre que la amenaza, que le grita u ofende, llegue a asesinarla", agregó.

Según la clasificación establecida por la Procuraduría General de la República, los femicidios generales son la sumatoria de los femicidios íntimos y los no íntimos, considerados entre estos los asesinatos cometidos por hombres o mujeres con quienes la víctima no tenía ninguna relación pasional. En esta categoría caen robos, riñas, violaciones sexuales y hechos ocurridos de manera accidental.

Para la Procuradora, uno de los problemas que afronta en su trabajo es la falta de recursos: "las limitaciones en el presupuesto hacen que, por más que yo quiera, no pueda ser más ejecutiva. No puedo exigirles a los Fiscales si no tengo herramientas que darles, ni cómo cuidarlos y cuidarlas, porque se necesita pensar también en los riesgos del Ministerio Público", comenta.
Reyes tiene, por demás, otras insatisfacciones: "el Ministerio de Salud Pública tiene que acabar de entender que la violencia es un problema de salud. Hay un protocolo que no se aplica. Si médicos y psicólogos no hacen su parte, las víctimas resultan revictimizadas. Y también al Ministerio de la Mujer le toca hacer más", agrega.

El personal de salud no observa ni aplica adecuadamente las Normas para el Tratamiento de la Violencia. La mayoría de los casos que llegan a sus manos no son reportados ni reciben seguimiento, pese al trauma y las consecuencias que suponen tales actos para la salud de las mujeres.
Una frustración frecuente entre quienes intentan frenar la violencia en República Dominicana se relaciona con la actuación de los y las juezas que, no pocas veces, parecen proteger a femicidas y abusadores al propiciarles impunidad con tecnicismos legales.

La Procuradora General Adjunta para Asuntos de la Mujer no suscribe ese punto de vista, aunque reconoce que hay razones en la gente para sustentarlo. Ella cree que "estamos avanzando como nunca" y elogia la labor de la presidenta de la Comisión de la Mujer del Poder Judicial, Eglis Smurdoc, con quien ha conseguido coordinaciones positivas para la causa que defienden.

"Poco puede hacer el Ministerio Público cuando se realizan todos los esfuerzos preparando un caso y luego -so pretexto de la imparcialidad- los jueces los desestiman y no actúan consecuentemente, de acuerdo con la Ley. Creo que se ha ido logrando una mayor sensibilización y se va reconociendo que un caso de violencia contra la mujer o un femicidio no puede ser visto ni juzgado como una bronca callejera o como el robo de una cartera…", argumenta.
República Dominicana tiene desde 1997 una Ley contra la Violencia Intrafamiliar que no satisface completamente a quienes entienden el problema, pero ofrece pautas para sanciones ejemplarizantes. Esas, sin embargo, suelen faltar en la mayoría de los juicios.

Las Denuncias No Bastan
Sólo en la capital, Santo Domingo, con una población total de 913.540 habitantes, las denuncias de este tipo de abusos llegaron a 6.475 el pasado año. Aunque no se han informado hasta ahora los datos de 2010, las evidencias hacen presumir que será superada.
Más allá de las estadísticas, los pasos para que una mujer consiga una orden de protección -incluida que ella misma haga la notificación al agresor- son tan tortuosos que no pocas desisten antes de hacer la denuncia.

Así opina la abogada feminista Susi Pola, quien participó los días 15 y 16 de marzo en un encuentro en El Salvador con la Relatora de Naciones Unidas para la Violencia contra la mujer. Allí presentó un tema, justamente, sobre femicidios, sobre lo cual habló en diálogo con SEMlac.

  • Al conocer de manera directa de las situaciones que viven las mujeres de otros países de Mesoamérica y el Caribe, ¿cómo valoraría las realidades dominicanas?

  • En lo que respecta a la violencia contra la mujer, estamos muy mal. Cuesta trabajo creer que un país como el nuestro, donde hay una legislación penal específica desde hace más de 12 años; donde el sistema de atención desde la justicia tiene una estructura mínima; donde la mayoría de los femicidios por violencia contra la mujer son íntimos; y donde casi el total de esos crímenes están registrados en la justicia, tengamos índices altos de impunidad y los asesinatos de mujeres vayan en incremento.
Hay que trabajar en la capacitación de los y las servidores y servidoras, con el registro y las estadísticas; pero, sobre todo, hay que asegurar una buena asesoría de género, por personas preparadas. Es imprescindible que la administración del Estado transversalice sus programas, proyectos y también las evaluaciones con enfoques de género.

Posicion De R.D., Ante La Tasa De Feminicidios


Catorce países de Latinoamérica y el Caribe se encuentran entre los 25 estados con mayor tasa de feminicidios, según un informe de la organización Small Arms Survey que sitúa a El Salvador como el país con más feminicidios, 12 por cada 100.000 féminas.

Entre las regiones con una tasa de feminicidios de más de 6 por cada 100.000 mujeres -considera muy alta- se encuentran El Salvador, Jamaica, Guatemala, Sudáfrica, Rusia, Guayana, Honduras, Azerbaiyán, Las Antillas, Colombia, Bolivia y Bahamas.

Por otro lado, Lituania, Bielorrusia, Venezuela, Letonia, Belice, Kazajistán, Moldavia, Brasil, Kirguizistán, Ucrania, Ecuador, la República Dominicana y Estonia se encuentran en el grupo de los países con una alta tasa de feminicios, de entre 3 y 6 por cada 100.000 féminas.

Según el estudio de Small Arms Survey, en torno a unas 66.000 mujeres son asesinadas cada año, un 17 % de las cuales son víctimas de homicidios intencionados.

El informe "Feminicidio: Un Problema Global" analizó los datos de homicidios de mujeres a nivel mundial desde 2004 a 2009 y concluyó que el porcentaje de feminicidios es "significativamente mayor en los territorios con altos niveles de homicidios".

En general, los porcentajes de feminicidios son más elevados en países caracterizados por altos niveles de violencia, y en estos casos las mujeres "son atacadas en la esfera pública y los asesinatos son perpetrados en un clima general de indiferencia e impunidad".

Pese a que en general existe una relación entre el número total de homicidios y el porcentaje de mujeres asesinadas, en el caso de Europa del Este y Rusia no se cumple esta tendencia, ya que estas regiones muestran unas tasas de feminicidio "desproporcionadamente altas" con respecto a los homicidios en general.

Un tercio de los crímenes contra las mujeres se perpetraron con armas de fuego.

En países como Brasil, Colombia, El Salvador, Guatemala y Honduras en el 60 % de los asesinatos de mujeres intervinieron las armas de fuego, una tasa que llega al 80 % en el caso de Ciudad Juárez (México).

Ley Sobre La Violencia Contra Las Mujeres 24-97



Ley sobre violencia contra las mujeres La Ley 24-97, sobre violencia contra las mujeres, en su artículo 309, acápite 1, señala que constituye violencia contra las mujeres toda acción o conducta, pública o privada, en razón de su género, que causa daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer mediante el empleo de fuerza física o violencia psicológica, verbal, intimidación o persecución. Sin embargo, muchos no cumplen esta ley, ya que cada día se reporta más casos de feminicidios.

Evidentemente, son muchas las personas que abogan por una respuesta general para los casos de feminicidios. Otras, agobiadas ya, se conforman con una respuesta de carácter urgente, tomando en cuenta que en este plazo de espera, pueden ocurrir múltiples homicidios hacia las mujeres. Pero no solo las mujeres son agredidas, sino que en los últimos años, también, los hombres denuncian las agresiones que reciben de mano de sus cónyuges, aunque en la mayoría de los casos son las secuelas que dejan a sus pasos hechos que iniciaron ellos mismos. 

LEY 24-97 

QUE INTRODUCE MODIFICACIONES AL CÓDIGO PENAL, AL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTO CRIMINAL Y AL CÓDIGO PARA LA PROTECCIÓN DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES

CONSIDERANDO: Que en consonancia con el desarrollo de la sociedad, la participación de la mujer en ella es decisiva, debido al papel que desempeña en el logro de la adaptación y comprensión de las nuevas características de la vida social. 

CONSIDERANDO: que no obstante, la mujer dominicana es objeto de violencia, que corresponde a los poderes públicos sancionar, toda vez que la violencia contra la mujer y la violencia intrafamiliar son problemas socioculturales que atentan contra los derechos humanos y ponen en peligro el desarrollo de la sociedad. 

CONSIDERANDO: Que la República Dominicana es signataria de la "Convención para eliminación de todas las formas de Discriminación contra la Mujer", así como la "Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer o Convención de Belem Do Fará", ambas debidamente ratificadas por el Congreso Nacional; en consecuencia, se hace necesario que todos los instrumentos legales del país estén acordes con las disposiciones de las referidas Convenciones.

Fases Del Circulo De La Violencia

 El Ministerio de la Mujer plantea que la violencia suele darse por fases, a lo que llama Círculo de la Violencia. Es cierto que el primer ataque puede aparecer como un hecho aislado, pero en la mayoría de los casos se desarrolla el círculo de la violencia, que comprende tres fases: 

1. Acumulación de tensión. Puede empezar con burlas sobre lo que hace la mujer, en este hay gritos y amenazas bajo la excusa de que ella realiza las cosas mal. 

2. Explosión violenta. Sin importar si la mujer ha hecho cosas para evitar el enojo de su pareja, llega el momento de la agresión. 

3. Luna de miel. Después de la violencia el agresor pide perdón, pero en muchos casos no llegan a esta última etapa, porque ocurren los asesinatos. El criminal promete que no va a volver a actuar así, entonces la mujer cree que la relación ha cambiado y vuelve a confiar, cayendo otra vez en la primera fase. 

En este círculo los ataques cada vez serán más frecuentes, fuertes, intensos y peligrosos. Aunque parezca imparable hay personas e instituciones que pueden ayudar a detenerlo, como es el caso de la Unidad de Atención a la Violencia Contra la Mujer del Ministerio de la Mujer.

Estadisticas De Feminicidios En Republica Dominicana

Cifras estadísticas Las estadísticas del Observatorio del Ejercicio Ciudadano de las Mujeres señala que en los primeros 6 meses del año 2012, se registraron 98 feminicidios en la República Dominicana, lo que equivale a un asesinato cada 44,6 horas; un poco menos de un feminicidio por cada dos días. Es importante señalar que en el primer semestre del año 2012, según se ilustra en el mapa de los casos por provincia, ninguna mujer había sido asesinada en: Santiago Rodríguez, Samaná, San José de Ocoa, Hato Mayor, Independencia y Pedernales. En cambio en Santo Domingo se registró el mayor número de feminicidio. 



Las estadísticas del Ministerio de la Mujer Como se muestra en la tabla (Feminicidios) con origen de los datos en la Policía Nacional y el Instituto Nacional de Ciencias Forenses, la cifra de Feminicidios ocurrida en la República Dominicana desde enero de 2005 al 9 noviembre de 2012 fue alarmante, registrándose en el año 2008 la mayor cantidad de feminicidios, con un total de 128 en todo el país. Mientras que en el 2007 ocurrieron 87 casos para ser uno de los años con menos muertes. Para el 9 de noviembre del año 2012 solo se registraron 90 casos de feminicidios observándose una baja sobre los años anteriores. En la tabla de homicidios y feminicidio por provincias se puede apreciar que la ciudad de Santo Domingo lleva la delantera con 48 casos, a esta le sigue Santiago de los Caballeros con 16, San Cristóbal con 12 y La Vega con 11 muertes. Mientras que en Independencia, Pedernales y Hato Mayor no se registraron ningún casos de feminicidios. En el año 2013 hasta el día 31 de octubre se habían registrado unos 121 casos de muertes violentas a mujeres, de los cuales 56 son de manos de sus cónyuges o exparejas, según expresó la encarga del departamento de la Prevención a la Violencia del Ministerio de La Mujer, la psicóloga Natividad López, quien lleva unos dos años en dicha posición. Lo que quiere decir que los feminicidios para el año 2013 aumentaron en comparación con el año 2012. Para este año el procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, reportó que los feminicidios han aumentado, y en ese sentido indicó que al mes de junio de 2014 van unos 45 casos, contrario al pasado año que hasta esa fecha habían ocurrido unas 27 muertes por esta causa. Agregó que es lamentable que en este año se haya experimentado un aumento de estos casos con relación al pasado año. Realidades como estas son pruebas fehacientes de que el país está mal encaminado en cuanto al tema se refiere. En los últimos años el feminicidio se ha salido de control. El número de mujeres asesinadas y en muchos casos maltratadas por hombres se nota cada día más. El Departamento de Prevención de la Violencia tiene oficinas todas las provincias y municipios del país. El Ministerio también cuenta una línea de emergencias 24 horas, de forma gratuita para las mujeres que son víctimas de violencia o que son amenazadas. A estos servicios se une el Departamento Legal donde se le da seguimiento a todos los casos sin costo alguno; todo esto acompañado del apoyo emocional que asegura López que reciben las mujeres maltratadas. “Pese a todo el esfuerzo llevado a cabo por el Ministerio de la Mujer, haciendo campañas en contra de la violencia como: “Vida sin violencia”, “No más violencia”, “Tolerancia Cero” y la más reciente “Únete”, los feminicidios aún persisten. Muchas mujeres se quedan en las relaciones violentas por los hijos, dependencia económica, escasos recursos y otras, porque quieren a sus parejas no sabiendo que pueden encaminarse ellas misma a la muerte”, destaca la especialista López. Pero bien, sabemos que no solo esos son los factores, sino que se unen elementos sociales. Los feminicidios se han convertido en escenas diarias que deja a su paso llanto, dolor y en muchos casos niños huérfanos. En la sociedad dominicana predomina el “Machismo”, como en muchos países de Latinoamérica y el Mundo. Otro factor que influye es la poca acción policial y legal ante los casos de violencia; y la falta de conciencia para razonar antes de actuar. Mucha culpa de esta también recae sobre las mismas mujeres y madres que sabiendo los problemas que afecta a esta sociedad que carece de tantos valores, van formando y educando a sus hijos e hijos en un ambiente inerte al cambio. Sino que más bien siguen sumando a la formación de futuros hombre y mujeres que no se respetan si quiera a ellos mismos.


Feminicidios, Un Drama Que No Cesa En La Republica Dominicana


Más de cien mujeres han muerto a manos de sus parejas o exparejas en lo que va de año en la República Dominicana, las últimas cinco el pasado fin de semana, y se teme que la cifra de este año supere las 230 víctimas de 2011, lo que algunos ya han calificado como "una tragedia nacional".

La República Dominicana está considerado por organismos internacionales como uno de países con mayor número de feminicidios al año en América Latina y el Caribe.

"Estamos muy alarmadas y muy preocupadas porque creemos que este fenómeno es ya una tragedia nacional", dijo a Efe Sergia Galván, la directora de la Colectiva Mujer y Salud, un grupo que desde 1984 trabaja en la defensa de los derechos de las dominicanas y que desde enero pasado ha contabilizado 105 feminicidios en el país.

La violencia de género en la República Dominicana "es de una magnitud muy grande" y "debería poner en alerta a todas las instituciones para dar respuestas a esta situación", señaló.

La experta calificó de "insuficiente" la respuesta del Estado ante la "gravedad" del asunto, al tiempo que reprochó la falta de refugios para mujeres maltratadas y sus hijos en la nación.

La muerte por violencia doméstica supera las enfermedades bajo control epidemiológico en la República Dominicana, de acuerdo con el grupo que preside Galván.

Estadísticas de la Procuraduría General de la República a las que tuvo acceso Efe indican que los asesinatos de mujeres han pasado de 190 en 2005 a 230 en 2011, mientras que entre enero y abril de 2012 se han contabilizado 66 muertes en el territorio nacional.

Poner coto a este problema pasa por la voluntad del Estado que, sin embargo, "se mantiene indiferente", dijo Galván.

"Realmente la respuesta quien la tiene es el Estado, con presupuesto, con políticas públicas y con voluntad política", opinó antes de reclamar "una respuesta interinstitucional", convencida de que "la violencia doméstica no es un asunto de la vida privada. Es de carácter público".

Al mismo tiempo, señaló el "estrecho vínculo" de la violencia con la pobreza, pero también con la cultura machista en el país.

"La violencia es parte de la cultura machista y patriarcal", por lo que "hay que revolucionar la cultura si queremos producir cambios", argumentó.

Asimismo, lamentó "el impacto de la violencia en el entorno familiar" que en muchos casos deja "un hijo huérfano, una madre en el cementerio y un papá en la cárcel".

La violencia familiar en la República Dominicana cada año deja en la orfandad a cerca de 800 niños y niñas, según datos de la Fundación Vida sin Violencia, que pidió al nuevo Gobierno de la República Dominicana, que asumirá sus funciones en agosto, que actúe "con firmeza y perseverancia".

La tendencia de estos crímenes es "lamentablemente ascendente", dijo la presidenta de la Fundación, Yanira Fondeur.

La entidad, entre otras medidas, pidió también mejoras en educación para luchar contra este problema, que sus representantes calificaron de "carcoma", además de planes preventivos y programas de reeducación y terapia para los agresores condenados.

El procurador general de la República, Radhamés Jiménez, anunció recientemente la ejecución de un plan, desarrollado por Unicef, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), "con criterios unificados" para la atención y protección "eficaz" a las víctimas de violencia de género e intrafamiliar.



Decapitada Por Su Marido

Caso De Fanny Julieta Sanchez Pinales 
Santo Domingo, D.N 
Abril 2010
Residencia, Capotillo. 



Casos De Feminicidio


Esta Es La Historia De Una Mujer Que Perdió Su Rostro A Causa De Una Golpiza De Su Marido!

Este Es Un Vivo Ejemplo De La Violencia Contra La Mujer En Latinoamerica.



Hombres En La Carcel, Explicando Sus Hechos Cometidos (FEMINICIDIOS), En Republica Dominicana. 

Etiologia Del Feminicidio


El feminicidio es el más grave y condenable acto de violencia contra las mujeres, que no solo implica un acto de barbarie, sino uno de los síntomas más claros de una sociedad históricamente desigual. Una de las posibles explicaciones señalan que el feminicidio no solo se circunscribe al acto homicida, sino a un contexto más complejo que incluye la trama social, política, cultural y económica que lo propicia, Monárrez (2009); apuntando a las relaciones de poder de una sociedad masculinizada, que mediante estructura, propaganda, ritos, tradiciones y acciones cotidianas, confirman el sometimiento de las mujeres. La afirmación de la virilidad mediante la sexualidad vinculada al poder, al control, la dominación y el sometimiento, da pie también al castigo y la humillación. Para Pierre Bourdeu (2000) los actos como matar, violar o torturar, el deseo de dominar, explotar y oprimir se vincula directamente al temor viril de excluirse del mundo de los hombres llamados fuertes o duros, incólumes ante el propio sufrimiento o el sufrimiento ajeno.

Para Langrade, (2006). “En el marco de la supremacía patriarcal de género de los hombres [...] como un mecanismo de control, sujeción, opresión, castigo y agresión dañina que a su vez genera poder para los hombres y sus instituciones formales e informales. La persistencia patriarcal no puede sostenerse sin la violencia que hoy denominamos de género”.
Las mujeres entre los 15 y los 44 años tienen una mayor probabilidad de ser mutiladas o asesinadas por hombres que de morir de cáncer, malaria, accidentes de tráfico o guerra combinados.
De acuerdo al Centro de Ginebra para el Control Democrático de las Fuerzas Armadas (DCAF) entre 113 y 200 millones de mujeres desaparecen demográficamente
Esta brecha es el resultado de diversos mecanismos:
  • Aborto de los fetos de niñas basado en una selección deliberada, también llamado aborto selectivo (facilitado por el Diagnóstico prenatal del sexo).
  • Infanticidio femenino en aquellos países en los que se prefiere a niños varones.
  • Falta de comida y atención médica, que se desvía hacia los miembros masculinos de la familia.
  • Los llamados «asesinatos de honor» y las muertes de dote.
  • Tráfico de mujeres.
  • Violencia doméstica o de género.
  • Mediante la incineración del cuerpo.
Esto implica que cada año entre 1,5 y 3 millones de mujeres de toda edad son víctimas de la violencia de género. La falta de cuidados médicos implica el fallecimiento de 600 000 mujeres al año durante el parto.

Diferencias

Diferencias entre el homicidio y el feminicidio

Isabel Claudia Martínez Álvarez sistematizó las diferencias entre el homicidio y el feminicidio.
Homicidio:
  • Existe un bien jurídico tutelado, la vida.
  • Es instantáneo, es decir, son excepcionales las acciones fuera de tiempo a la comisión del delito.
  • El sujeto pasivo no requiere una calidad específica del sujeto activo o pasivo.
  • En los casos específicos como homicidio calificado se tiene que hacer un análisis de las calificativas, por lo general, alevosía, premeditación y ventaja, las cuales contienen elementos subjetivos que quedan a la interpretación del operador jurídico que las interpretará.
  • En el caso del homicidio se parte de la premisa de que éste puede ser doloso o culposo, es decir, se parte de la voluntad del sujeto activo para acreditar la conducta.
Feminicidio:
  • Existen diversos bienes jurídicos tutelados: la vida, la dignidad, la integridad, entre otros.
  • El delito se configura una vez que se priva de la vida a una mujer y se actualiza una de las hipótesis que se puede generar antes o después de la privación de la vida de una mujer.
  • El sujeto pasivo tiene como calidad específica el hecho de ser mujer.
Para la acreditación de la hipótesis que acredita el delito no se requiere de medios comisivos, pues las razones de género no son medios comisivos.
  • Se requiere la realización de una o varias conductas, la última conducta puede ser la privación de la vida o viceversa.
  • Es un delito que en sí mismo es doloso, esto es por las conductas realizadas y por los bienes jurídicos tutelados diversos

Definicion De Feminicidio

Feminicidio es un neologismo creado a través de la traducción del vocablo inglés femicide y se refiere al asesinato de mujeres por razones de género.
El feminicidio entra en la esfera de la violencia contra la mujer, pero también toma otras formas. Aunque existen otros casos como una mala o falta de atención médica durante el embarazo o el parto que pueden acarrear la muerte de la madre. En algunos países como China e India, las estadísticas muestran un ratio de hombre a mujer de 120 hombres por cada 100 mujeres.1 Sumado al aborto selectivo, el feminicidio también toma la forma de infanticidio, y la violencia en contra de la mujer en algún estado de su vida.
Diana Russell utilizó el término femicide por primera vez en 1976 ante el Tribunal Internacional sobre los Crímenes contra la Mujer en Bruselas, para definir las formas de violencia extrema contra la mujer. La misma Russell, junto con Jane Caputi, redefine este concepto en 1990 como “el asesinato de mujeres por hombres motivado por el odio, desprecio, placer o sentido de posesión hacia las mujeres”. Un gran aporte de Russell y Caputi fue visibilizar que los motivos por los que históricamente se han asesinado personas debido a su raza, nacionalidad, religión, origen étnico u orientación sexual, son los mismos por los que se asesina a las mujeres y de este modo enmarcan el femicide como un crimen de odio.
Según el Observatorio Ciudadano Nacional sobre Feminicidio de México,2 el feminicidio se refiere al asesinato de mujeres por parte de hombres que las matan por el hecho de ser mujeres. Los Feminicidios son asesinatos motivados por la misoginia, porque implican el desprecio y el odio hacia las mujeres; y por el sexismo, porque los varones que las asesinan sienten que son superiores a las mujeres y que tienen derecho de terminar con sus vidas; o por la suposición de propiedad sobre las mujeres (OCNF 2009:11).